Bayonetazos...

A partir de la publicación de este “bayonetazo” hacemos del conocimiento de todo aquel que se acerque a este blog de Historia Política de Venezuela, que publicaremos en esta suerte de “sección” y entre artículos de mayor elaboración teórica, reflexiones cortas acerca de nuestra historia política, respecto de ocurrencias singulares que hubiesen acaecido en su devenir, entre los siglos XIX, XX y hasta XXI.

La hemos titulado de este modo, en principio para dotarla de esa "impronta épica" que tiene nuestra historia (sobre todo la política) luego de hacerse acerada nuestra pluma para escribir, trocadas las levitas por guerreras y los birretes hechos emplumados morriones. En segundo lugar por la “Bayoneta”, acero militar mortal surgido del siglo XVII, que colocado en el arma orgánica del infante, a saber, el fusil,  y luego de haber consumido su “último tiro”, servía al propósito de “cargar” contra el enemigo en la búsqueda del enfrentamiento “cuerpo a cuerpo”. La carga “a bayoneta calada” se hizo famosa en los siglos XVII, XVIII, XIX y aún a en la medianía del siglo XX. La bayoneta está pre-configurada para que el infante ataque en rápidos movimientos, “entrando y saliendo” del cuerpo del enemigo, causando “heridas” debilitantes y limitadoras de la capacidad del contrario o, en última instancia, la muerte.

Estos “Bayonetazos” no persiguen ni lo uno, ni lo otro; ni busca “la herida limitadora”, ni tampoco “la conclusión mortal”, pero si “la siembra”, mediante “entradas y salidas rápidas”, de la inquietud intelectual y la duda histórica, sobre todo en los más jóvenes investigadores de nuestra historia patria.

Reciba usted, amigo lector, si acaso se allegara a este “campo de batalla”, este “Bayonetazo” de Historia Política Patria venezolana. Aquí esperamos “herirlo” con la pasión por lo “nuestro”, hoy tan deformada por quienes pretenden hacerse, desde su atalaya revolucionaria, interpretes únicos de nuestra impronta histórica.