En la declaración que el
Comandante Pedro Carujo rinde ante el mismo Alcalde Primero de Valencia, el 4
de enero de 1836, hace esta importante afirmación, luego de que en el documento
se dejara constancia acerca de la formulación de la interrogante en los
siguientes términos: “Se le hace cargo
como sabiendo que infringía una ley de la Nación y que con ello cometía delito contribuyendo el ocho de
julio del año próximo pasado para la deposición de los altos funcionarios de la
República…”, seguidamente contestó el imputado: “…no lo creyó delito, porque en
política no hay delito y que el resultado es el que califica las acciones.”[1]
Esta declaración de Carujo
constituye un verdadero “bayonetazo”.
La misma “bayoneta” que sirvió, ha
servido y servirá para “asesinar” en
Venezuela (o al menos herir de gravedad) instituciones, principios y hasta
Constituciones: “…en política no hay delitos porque el resultado califica las
acciones”. No se trata de principios, ni de leyes, ni de defensas
institucionales: se trata del “resultado de las acciones”. Acaso
de ahí provenga esa vieja máxima de la pragmática
política nacional: “en política resulta bueno solo aquello que
da resultados”. Y cómo dice el mismo Carujo con posterioridad (y así lo
afirmó Urbina en su momento) si la Revolución de las Reformas hubiese
triunfado, él hubiese sido reputado de héroe, que no de asesino, ni sedicioso. Acaso algo
similar hubiese ocurrido con Luis Cabrera Sifontes, si no hubiese sido fallido
el atentado de Los Próceres contra Rómulo Betancourt, en 1960; o con Teodoro
Molina Villegas, de haber tenido éxito el Carupanazo, el 4 de mayo de 1962. Y,
finalmente, el mismo Hugo Chávez, de resultar victorioso el 4 de febrero de
1992, lo que ciertamente terminase ocurriendo cuando resultara el candidato
victorioso en las elecciones presidenciales de 1998: la metamorfosis del golpe
de Estado del 4 de febrero de 1992 de “Golpe”
común y corriente, a “Rebelión Militar
Victoriosa”…“Los resultados” solo “los resultados”…Acaso el eterno “Alea
jacta est” de nuestras acciones políticas tumultuarias…
[1]
___, Juicio y sentencia de Pedro Carujo por la conspiración contra Vargas.
Escuela de Historia. Facultad de Humanidades y Educación. Caracas, 1960. Pág.9.
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